Cualquier cosa de valor saquenlá que voy a pasá con la mochila, dijo el belincuente.

viernes, 4 de noviembre de 2011 |

[Levemente inspirado en una historia real]

Yo a la vítima no la conocía pero vi cómo fue todo el tema de su fellecimiento porque iba en el asiento de atrás del todo, al fondo del coletivo, la vítima murió como consecuesia del tirotero que se armó entre un guarda de la policía enfederal y un belicuente dogado pero dogado mal. El belincuente subió al coletivo donde yo viajaba sentadito al fondo y cansadazo porque volvía del laburo y apena subió el belincuente procedió a apuntar el reólver a la cien del condutor que  ahí nomá cayó en un profundo miedo como yo pude contatar por el espejo que jutamente estaba ubicado de una manera que me quedaba justo a mí para vele la cara al condutor y por eso, o sea por el miedazo que le pintó, el condutor paró el vehícul para evitar una colección con otros auto o con algún peatón.
Cuando el coletivo se detuvo el belincuente tiró un tiro al techo y rompió una de las luces del techo y el vidrio de la luz le calló en la cara pero el belincuente ni parbadeó, unos pedazos de vidrio así de grande en los ojos pero ni un parbadeo y por eso me di cuenta que estaba dogadazo pero mal, el belincuente, o sea para no parbadear cuando te caen vidriecitos en los ojos tenés que estar muy drogado, loco, te tenes que habé metido no sé,  veinte quilo de poxirrán con puré, o algo así, zarpadaso en merca tené que andá, porque si no es como un sentido reflejo el parbadear apena te entra algo en el ojo, no lo decidí vos, el cuerpo lo hace solo para no quedate ciego. Bueno, el belincuente tiró al techo y gritó todos tranquilito que no le voy a hacer nada a nadie pero vayan sacando las billeteras y los celulares y si tienen relog el relog y cualquier cosa de valor saquenlá que voy a pasá con la mochila, dijo el belincuente porque tenía una mochila abierta que fue pasando para que todos los pasajeros fueran tirando las cosas de valor y encima estabámo detenido en el medio de la calle y los auto de atrá empezaron a ingresá en el terreno de la impaciencia, digamo, y meta bocinazo de frente mar y gritaban dale culiado arrancá el coletivo che gorriadazo y yo me di cuenta de dos cosa en ese momento: por un lado que el tipo de al lado era un cobani de civil, no sé cómo me dí cuenta, si en la mirada de botón que tenía o por ahí algo más astrato o sea que no se puede ver pero se siente, una intuición,  qué sé yo, y la segunda cosa que me di cuenta es que el belincuente estaba muy inetable por los bocinazos y también porque había gente muy asustada que lloraba y tardaba en dale las cosas a la mochila. Yo pispié de reojo al cana y vi que estaba  tratando de sacar la reglamentaria con carpa, disimulando, la tenía metida en el pantalón, o sea por la espalda, en la cintura, y el belincuente, dogadazo por suerte, ni se dio cuenta, y entonce el cana se puso el chumbo abajo de la pierna y esperó el momento obortuno para reventale la cara al gil ese.
El belincuente pasó con la mochila y yo le tiré cinco pesos que es todo lo que tenía encima y me dijo el relog también no te hagá el papo y yo ni me había dado cuenta del relog así que se lo tiré, total qué me importa el relog, truchazo era, de la peatonal, decía Citizen y todo, bien hecho, pero truchazo, baratazo, y bueno el belincuente siguió y cuando pasó al lado del cobani el cobani lo miró y no hizo nada y el belincuente le dijo dale otario qué te demorá y el cana le dijo no tengo nada maestro y el belincuente le dijo mostrame la mano entonces porque el cana tenía la mano con el chumbo abajo de la pierna y el cana le respondió que mejor siguiera de largo y el belincuente perdió la paciencia y le apuntó el reólver a la cara del cana y todos gritaron y muchos lloraban y el cana dijo ok ok, te lo doy y de golpe sacó el chumbo y le metió un cuetazo en la cara al belincuente, pero cuetazo cuetazo, no sabé, yo lo vi porque estaba al lado del cana o sea en la fila de asientos del fondo y al lado del cana, con el belincuente frente a nosotros, y te puedo asegurá que le reventó la cara, justito abajo del ojo, pumba, sacala a bailar.
El belincuente no murió ahí nomá sino que le dio una histeria tremenda de dolor y empezó a correr sin control gritando por todo el pasillo del coletivo y tirando un par de tiro a cualquier lado, por suerte no le pegó a ningún pasajero. El cana apuntó y le disparó otro tiro y justo un momento antes, mirá que mal ocote, alguien le puso la traba al belincuente y cuando el belincuente se calló al piso la bala del cana pasó de largo y se le metió en el pecho a la vítima, que estaba sentada como de costado, o sea con las piernas al pasillo, mirando todo, pobre flaca, y después del balazo se calló para atrá y quedo medio como apoyada en el asiento de adelante, boleta.
El belincuente se retorcía en el piso y gritaba del dolor de la caripela y el cana le vació la reglamentaria en la espalda y después trató de salvar a la vítima con boca a boca y esas cosas pero ningún salvar, ningún ningún salvar, si vos la habría visto te daría cuenta, tenía el pecho perforadazo y todo rojo de la sangre, hediondo, un asco, más muerta que la bosta además, pálida y los ojos abiertos fijos así sin parbadear.
Y bueno entonces después se normalizó todo o sea dentro de lo que cabe: el cana pidió refuerzo y se pudo habilitar un carril para que circulen los otros autos y no haiga embotellamiento. Yo me quedé un rato pispiando ahí de curioso nomá pero al pedo porque no pasó nada más y encima cayeron ustedes a obligarme a declará, y eso es todo, no vi nada más, palabra de honor, en serio, ojalá sirva para algo, ¿me puedo tomá el palo ya?

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