Composición que hice en tercer grado.

Hey remember that time
I tried to save a pigeon with a broken wing
A street cat got him by morning
and I had to bury pieces of his body
in my building's playground

Regina Spektor. That Time.

Y ahora transcribiré una composición que nos hicieron hacer un día de tarea, cuando yo iba a tercer grado y soñaba con ser astronauta y creía que el mundo era un lugar hermoso. Lo haré sobre todo para reflejar el paso del tiempo, y de esta manera recordarles a todos los lectores que el ser humano es más que nada mortal, y que eventualmente todos estiraremos la pata. No, no para elongar. O sea puede ser también para elongar, pero yo hablaba en sentido figurado, es decir que al final todos falleceremos.
Algunos se irán de este mundo ya viejos, y sufrirán, por ejemplo, un ataque al corazón cuando estén por cebar mate:
_ Qúe frío que se ha puesto... me voy a cebar unos matecitos...
Y acto seguido, con una mano en el pecho:
_ ¡Agh!... un ataque al corazón... y nunca... visi...té... Formosa...
Otros morirán súbita e inesperadamente, por ejemplo aplastados por una foca mientras responden a una encuesta en la peatonal:
_ ¿Cuántos son en tu familia?
_ Somos cinco.... bueno seis con el perro...
_ ¿Y como se llama tu ma...? ¡Cuidado, una foca!!
Y así es más o menos como puede morir un ser humano, por lo cual es importante tener siempre presente qué mortal que es el hombre, y para eso transcribiré una composición que nos hicieron hacer un día de tarea.

Composición.
Ayer estaba jugando en el jardín con el Power Ranger Azul. Estaba muy contento porque el Power Ranger Azul puede tirar rayos láser por los ojos, y porque había un venteveo cantando en la rama de un árbol. Pero entonces la melodía que en su pico nacía se detuvo de golpe, y el pajarito explotó. Yo me asusté porque hizo un ruido muy fuerte, y después me dio risa porque había plumas por todos lados, y después me quedé pasmado, con la mirada perdida en la inmensidad abrumadora que es el cielo, y segundos después, con los ojos abiertos a la verdad, dije "somos el ejemplo último de la brevedad. Somos menos que nada, una gota de agua en el medio del infierno".
La señora Arsénico, que volvía del mercado tirando del carrito de las compras, me escuchó y dijo:
_ Pero Lucas, qué decís.
_ Mire señora, usted con ese apellido tendría que saber mejor que nadie que el ser humano como raza está parado sobre el último peldaño de una escalera mecánica que desciende inevitablemente a la oscura sepultura del olvido, cuya lápida no es más que un reloj que ya no funciona.
_ Pero, las cosas que dicen los chicos de hoy..._ suspiró la señora Arsénico y se alejó.
Recogí los restos del pobre pajarito y los enterré junto con el Power Ranger Azul. Mi amigo imaginario Friedrich estaba conmigo, y mientras aplanaba el diminuto montículo donde yacía el ave explosiva, exclamó con voz solemne:
_ Pajarito que estallaste, nunca te olvidaremos.

Cuando volví a casa encontré a mamá sentada en el sillón, memorizando palabras en ruso. Mamá estudia idiomas pero no deja que nadie le enseñe, entonces agarra un diccionario y memoriza una por una todas las palabras. Luego viaja a algún país donde se hable esa lengua y pule sus conocimientos. Una grosa, mi mamá.
_ ¡Dónde estuviste! ¡Tenés plumas en todo el cuerpo!_ me dijo cuando me vio.
_ Sí, pero no son mías, son de un venteveo que mientras cantaba estalló.
_ Claro... bueno andá jugá con el Polder Reigner.
_ Es Power Ranger, ma.
_ Por eso, con el Polder Reigner.
Lo que pasa es que mamá aprendió ingles memorizando las palabras de un diccionario, pero nunca pudo pulir los conocimientos porque es muy caro viajar a Londres, entonces dice Polder Reigner, o jalou, o tis is a jors.
_ Ma_ le dije, y mamá separó la vista del diccionario español-ruso.
_ ¿Mm?
_ ¿Vos pensás seguido en que al final todos besaremos los ásperos labios de la muerte y nos sumergiremos en la nada misma?.
_ Sí, claro, todo el tiempo. Si somos como un hombre bajando una escalera mecánica que lo depositará en la sepultura del olvido, que tiene una lápida que no es más que...
_ Un reloj que ya no funciona_ completé.
_ Andá, andá jugar con el Polder Reigner que en un rato te llamo a tomar un licuado de estracsberris.

Me fuí a mi pieza y me puse a jugar con el Power Ranger Amarillo, porque el Power Ranger Azul compartía el sepulcro con el ave explosiva.
Ya no estaba tan contento, porque el Power Ranger Amarillo no tira rayos láser por los ojos y solamente puede volar y también porque todos, eventualmente, vamos a morir.